CUIDADO!!! LOS OPIODES SON PELIGROSOS
Los opioides son un grupo de
medicamentos utilizados para tratar el dolor. Estos medicamentos funcionan al
unirse a los receptores de opioides en el cerebro y en todo el cuerpo,
reduciendo así la percepción del dolor. Los opioides son medicamentos muy
efectivos, pero también pueden ser peligrosos y adictivos si no se usan
correctamente
El uso más común de los opioides es para tratar el dolor agudo, como el dolor después de una cirugía o una lesión. Sin embargo, también se prescriben para tratar el dolor crónico, como el dolor de espalda y la artritis. Éste es el uso general de los opioides, sin embargo, hoy en día también existe paralelamente entre grandes grupos de población, un uso ilegal de los opioides, ya que producen una sensación de euforia, y por lo tanto son utilizados para drogarse.
El uso incorrecto de los opioides puede
tener graves consecuencias para la salud. Los efectos secundarios incluyen
somnolencia, confusión, náuseas y vómitos, estreñimiento y dificultad para
respirar. Si se toman en dosis elevadas, los opioides pueden disminuir la
respiración de una persona y, en algunos casos, llevar a la muerte por
sobredosis.
Además, los opioides son altamente
adictivos. El uso prolongado de opioides puede llevar a la dependencia y a la
adicción, lo que aumenta el riesgo de sobredosis. Pero también debe considerase que, la adicción a los opioides
puede tener un impacto muy negativo en la vida de una persona, como pueden ser, la
pérdida de su capacidad funcional, cognitiva o mental.
Para reducir el riesgo de uso incorrecto
de los opioides, es importante seguir las instrucciones del profesional medico al tomarlos.
Los opioides solo deben ser tomados bajo supervisión médica y en la dosis
prescrita. También es importante no compartir, (recomendar), los opioides con otras personas a quienes no se les haya indicado bajo una prescripción médica.
¿Crees que puedes estar presentando una adición a los opioides?
Para identificar una posible adición a los opioides, considera los siguientes aspectos:
- síntomas físicos y emocionales: Algunos de los síntomas físicos que pueden indicar una adicción a los opioides incluyen la constipación, la sudoración excesiva, la disminución de la libido y la somnolencia. En cuanto a los síntomas emocionales, las personas adictas a los opioides pueden experimentar ansiedad, irritabilidad, depresión, cambios de humor bruscos, aislamiento social y cambios en el rendimiento escolar o laboral.
- patrón de uso: Las personas adictas a los opioides a menudo toman más de lo que se les ha recetado o lo hacen con más frecuencia de lo indicado. También pueden buscar formas de obtener opioides de manera irregular.
En resumen, los opioides son medicamentos altamente efectivos para tratar el dolor, pero también pueden ser peligrosos y adictivos si no se usan correctamente. El uso incorrecto de los opioides puede tener graves consecuencias para la salud, incluyendo la dependencia y la adicción, y aumenta el riesgo de sobredosis. Es importante seguir las instrucciones del médico al tomar opioides y almacenarlos de manera segura y en caso de que tengas alguna duda buscar ayuda profesional.